Destruíste todo aquello que hizo de nuestros besos los más hermosos;
invocaste fantasmas de vidas pasadas,
me aburriste, te aburriste
y decidimos buscar en el afuera
todo aquello que alguna vez nos hizo únicos
Y ahora...
...nada.
No hay amor, no har perdón, no hay odio
tampoco ambición; sólo puedo sentir un inmenso dolor
punza y aflige mi acongojado corazón marchito
mi palidez es preocupante y tu indiferencia es la misma de siempre.
Cursi, monótona, poco inspiradora y sucia.
Es como me describe tu mirar,
así es como mi piel resiente
lo que brota de tu voz...
Y busco golpes, busco vidas,
encontrando sólo crueldad y agonía...
provocando olvidos terrenales y serias, muy profundas heridas...
ahora sólo vomito
lo que a mi interior aqueja
y canto sonetos de nuevas fronteras
con la firmeza de creer
que todo fue un malentendido,
y que en realidad,
no deberíamos ser nisiquiera amigos.
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